Animalitos y plantitas, de eso está hecho nuestro planeta. Y decidir escribir sobre este tema no está siendo nada fácil, pues nos enfrentamos al tan mentado calentamiento global, a la caza indiscriminada de especies en extinción, a la escasez de agua potable, y ni que decir de la última gracia de nuestra especie en el Golfo de México; en donde no tenemos ni idea del impacto real que tendrá sobre nuestro ecosistema.
Los Estados Unidos de Norte América han dicho a través de diferentes voceros, que ellos serán los que pagarán por el derrame, ¿con qué? ¿Dólares?
Otro de los grandes absurdos del mundo capitalista, en donde asumimos que aquellos países que pagan grandes cantidades de dinero por las emisiones generadas por sus diferentes actividades, es que pagando por lo bonos de carbón solucionamos nuestro problema ecológico. Pregunta, ¿Alguien ha visto un reporte de la aplicación de los fondos provenientes de los bonos de carbón? Sí alguien lo tiene, sería de gran ayuda que lo compartiera con nosotros.
Es por ello que más que describir la tan apremiante situación que estamos viviendo, los invito a que reflexionemos y hagamos cada uno de nosotros lo que esté a nuestro alcance para aliviar la carga que le estamos imponiendo a nuestro planeta, porque no debemos olvidar que no tenemos otro.
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