Absurdo retomar los nombres de los muchos famosos que han sido víctimas de secuestro o plagio en este país, casí todos los recordamos tristemente; interesante sería poder obtener los nombres de todos esos no famosos, pero no por eso menos importantes, que han sufrido la misma suerte.
¿Qué está pasando?
Lo que pasa es que perdimos el control, perdimos el control y la confianza en nuestras instituciones, en nuestras fuerzas de seguridad, en nuestro congreso y en nuestro Presidente.
Entre secuestros, plagios, robos, asaltos, asesinatos, extorsiones, “guerras” contra el crimen, etc., es que tenemos creciendo a nuestros hijos y yo ya no quiero eso.
Esta situación es inaceptable, que el hampa haya tomado control de nuestro país es inaceptable, pero más aún lo es el hecho de que no parece que podamos hacer nada.
Un edificio de 48 consultorios médicos, ubicado en la Ciudad de Reynosa, Tamaulipas. En donde se prestaba –hasta hace un mes- un servicio de primera necesidad a la población de esa región; hoy es un edificio abandonado.
Todo comenzó hace un año aproximadamente, cuando se les exigió a los médicos que ahí tenían sus consultorios, una cuota de protección de $100.00 pesos diarios; que como no representó un monto oneroso, decidieron pagar.
Un año después y con un incremento del 1500% en la cuota de seguridad, un consultorio incendiado –el del primer médico en decidir no pagar- el edificio se encuentra en ruinas, los médicos no atienden más ahí.
Todos sabían quién pasaría a recoger la cuota de seguridad diariamente, no más de tres personas diferentes pasaban a hacerlo; ¿Y?
Nadie hizo nada, claro que se denuncio, claro que se pidió ayuda a los tres niveles de gobierno y el resultado fue el menos deseado, NINGUNO.
¿El tema es la inseguridad o el tema es la capacidad de corromper que tiene el crimen organizado y debería entonces ser este el foco de la “guerra” contra el crimen?
Y el Jefe Diego?
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